La prohibición de aparentar [ar-riá]
Dijo Alá [Alabado sea]:
“Di: Yo soy sólo un mortal como vosotros, a quien se ha revelado que vuestro Dios es un Dios Único. Quien cuente con encontrar a su Señor, que haga buenas, obras y que cuando adore a su Señor, no Le asocie nadie” [18:110]
Narró Abú Hurairah [Alá se complazca de él] que el Mensajero de Alá [la paz y las bendiciones de Alá sean con él] dijo: “Alá exaltado sea ha dicho: “No necesito de asociados; quien realice una obra en la que asocie otros junto a mí, le abandonaré junto a su acto de asociación”[1].
Relató Abú Sa’id [Alá se complazca de él] que el Mensajero de Alá [la paz y las bendiciones de Alá sean con él] dijo: “¿Acaso no he de informaos sobre aquello que temo más para vosotros que el falso Mesías?” Respondieron: “Por supuesto que sí”. Dijo: “La idolatría oculta. La persona comienza su oración, y la alarga al encontrar que una persona lo observa”[2].
CONCLUSIONES:
- La interpretación de la Aleya [18:110].
- La buena obra es rechazada si se introduce en ella algo dirigido a otro que Alá.
- La razón de esto, es que Alá [Alabado sea] es absolutamente Autosuficiente.
- Otra razón es que Alá no necesita de asociados.
- El temor del Mensajero de Alá [la paz y las bendiciones de Alá sean con él] de que sus compañeros [Alá se complazca de él] caigan en las apariencias [ar-riá].
- El Profeta [la paz y las bendiciones de Alá sean con él] explicó que la apariencia sucede cuando la persona inicia su oración sincera para Alá, pero luego la alarga al ver que alguna persona lo observa.