El Milagro de lo Desconocido (del Noble Qur’ân)

El Milagro de lo Desconocido (del Noble Qur’ân)

 

 

De las evidencias maravillosas del milagro del Qor’ân, está su milagro de lo desconocido; ya que informó sobre asuntos que ocurrirían en el futuro, y de hecho, sucedieron como se advirtió, sin ninguna modificación, y esto no puede ser en absoluto creado por una mente humana. Hay muchos ejemplos en el Noble Qor’ân al respecto, pero mencionaremos uno sólo, para ser una evidencia sobre los demás.

 

De entre esos ejemplos que hay en el Qor’ân, resaltaremos el dicho: “Alif, Lam, Mim. Los romanos han sido vencidos en la tierra más próxima. Pero ellos, a pesar de su derrota, vencerán dentro de algunos años. El mandato pertenece a Al-lâh antes y después. Ese día se alegrarán los creyentes por el auxilio de Al-lâh. El auxilia a quien quiere y él es el Conocedor, el Compasivo.”[1]. 

 

El origen del suceso, es que los persas –los cuales eran ateos- vencieron a los Romanos –que eran creyentes de las Antiguas Escrituras-, así que los incrédulos de La Meca, se alegraron de la derrota de los creyentes, entonces Al-lâh reveló las Aleyas anteriores como desafío a los árabes y buena nueva para los creyentes; puesto que los que creen y tienen fe, serán los que triunfarán. Sin embargo, lo que nos interesa aquí, es el que Sagrado Qor’ân informó sobre un evento desconocido importante, que nadie –en aquel tiempo- pudo modificarlo  ni desmentirlo, el cual es uno de los milagros de lo desconocido, que el Noble Qor’ân trajo desafiando con ello a todo aquel obstinado en negar su verdad. Y de hecho, ocurrió lo que Al-lâh, el Altísimo, informó sobre que los romanos vencerían a los persas, y eso tuvo lugar durante la batalla de Badr[2].

Y de las Aleyas coránicas que albriciaron a la minoría musulmana de La Meca, en cuanto a que triunfarían contra su enemigo, y que su Estado se establecería, destaca:“Tal grupo será derrotado y darán la espalda.”[3]. Ibn Kazîr citó en su interpretación de Qor’ân,  que cuando esta Aleya fue revelada, Omar (que Al-lâh Esté complacido con él) dijo: “¿Qué grupo será derrotado? ¿Y qué grupo triunfará?” Luego dijo: “El día de Badr, vi al Mensajero (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) coger su escudo diciendo: “Tal grupo será derrotado y darán la espalda”, entonces entendí su interpretación de ese día[4].

También otro de los milagros de lo desconocido, es lo que Al-lâh anunció a su Mensajero y a los creyentes, sobre que entrarían en la Mezquita Inviolable, realizando la circunvalación alrededor de la Ka‘ba, pues dijo: “Así fue como Al-lâh le confirmó la visión a Su mensajero con la verdad: Entraréis en la Mezquita Inviolable si Al-lâh quiere, a salvo, con la cabeza afeitada o los cabellos recortados y no tendréis nada que temer. Él supo lo que vosotros no sabíais y dispuso, además de esto, una conquista cercana.”[5]. Esta Aleya fue revelada al irse de AlHudaybia.

 

El Imam Ibn Kazîr dijo al interpretar dicha Aleya: “El Mensajero de Al-lâh (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) tuvo una visión donde vio que había entrado en La Meca y realizado las circunvalaciones que se realizan a la kaaba, así que lo contó a sus Compañeros estado en Medina. Y en el año de Al Hudaybia, nadie de ellos dudó de que dicha visión tendría lugar ese año; de modo que cuando ocurrió la reconciliación, y volvieron en el mismo año, con la condición de que regresarían al año siguiente, algunos Compañeros se sintieron molestos, hasta que Omar Ibn Al Jattâb (que Al-lâh Esté complacido con él) le preguntó al respecto, diciendo: ¿Acaso no nos has dicho que vendríamos a la Casa y realizaríamos la circunvalación a la Kaaba? Contestó: “Sí, ¿acaso te he dicho que lo haríamos este año?” Dijo: No. Entonces el Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) exclamó: “Ciertamente, irás a ella y efectuarás la circunvalación[6]”[7].

Efectivamente, esta promesa se realizó al año siguiente; ya que el Profeta (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam) y sus Compañeros realizaron ‘Omra (Peregrinación menor), de la forma que el Noble Qor’ân les mencionó; es decir, con la cabeza afeitada y gozando de seguridad en la Mezquita. Esto tuvo lugar en el mes de Dul Qa‘da en el año siete de la Hégira[8].

Sin duda, la realización de lo que el Sagrado Qor’ân anunció, sin alteración en la explicación de los detalles del estado de los musulmanes, o cambio en la fecha de la‘Omra, indica clara y perfectamente la sinceridad de Al-lâh y su Mensajero (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam).

Además, el Qor’ân albrició a los musulmanes que tendrán poder y serían sucesores en la tierra, pues dijo: “Al-lâh les ha prometido a los que de vosotros crean y practiquen las acciones rectas, que les hará sucesores en la tierra como ya hiciera con sus antepasados y que les reafirmará la práctica de Adoración que tienen, que es la que él ha querido para ellos, y que cambiará su miedo por seguridad. Me adorarán sin asociarme nada. Quien reniegue después de eso... Esos son los descarriados.”[9]. Y esto se realizó para los musulmanes en menos de veinticinco años, ya que se volvieron famosos por sus valores y civilización; de modo que su sucesión se extendió desde China, por el este, al Atlántico por el oeste, llegando a Europa por el norte.

 

Esta es una parte del milagro del Qor’ân; aquel milagro cuyas maravillas nunca terminan; pues es el Libro de Al-lâh que no acepta falsedad en absoluto, así que mereció ser el milagro eterno, del Profeta Muhammad (sal-lal-lâhu ‘alaihi wa sal-lam).

 

[1] [Sura Ar-Rûm (Los romanos) 30: Aleya 1-5].

[2] Al Wâhidî: Asbâb An-nuzûl, Pág. 231,232.

[3] [Sura Al-Qamar (La Luna) 54: Aleya 45].

[4] Ibn Kazîr: Tafsîr Al Qur’ân Al ‘Adhîm 7/482.

[5] [Sura Al-Fath (La Conquista) 48: Aleya 27].

[6] [Al Bujârî (2731), (2732)].

[7] Ibn Kazîr: Tafsîr Al Qur’ân Al ‘Adhîm 7/356.

[8] Consulte: Ibn Hishâm: As-sira An-nabawiyya 2/270.

[9] [Sura An·Nûr (La Luz) 24: Aleya 55].

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