La prohibición de utilizar cualquier nombre que indique servicio o adoración de otro que Alá
Dijo Alá [Alabado sea]:
“Pero, cuando les dio uno bueno, asociaron a Alá en lo que Él les había dado. ¡Y Alá está por encima de lo que Le asocian!” [7:190]
Dijo Ibn Jazhm: “El consenso general de los sabios ha determinado la prohibición de utilizar cualquier nombre que implique adoración de otro que Alá, como siervo de ‘Omar [Abdu ‘Omar], o Siervo de la Ka’bah [AbdulKa’bah] u otro similar, a excepción de Abdulmuttaleb.
Ibn Abbas [Alá se complazca de él] dijo acerca del significado de la Aleya: “Cuando Adán mantuvo relaciones [sexuales] con Eva esta quedó embarazada. Entonces vino a ellos el demonio y les dijo: “Yo soy aquel que causó vuestra expulsión del paraíso, así que obedecedme o haré que le crezca [al niño dentro del vientre] dos cuernos como los del ciervo que rasguen tu vientre, y os haré otras cosas [atemorizándolos] así que llamadlo Abdul Hariz [siervo del sembrador]”. Ambos se negaron a hacerlo, pero el feto nació muerto. Cuando ella volvió a quedar embarazada, este vino una vez más y les dijo como antes recordándoles lo que había sucedido. Pero esta vez el amor por el futuro hijo los dominó y le llamaron Abdul Hariz”. Dijo [Ibn Abbas [Alá se complazca de él]]: “A causa de ello fue que Alá dijo: “Y se les agració con lo que pidieron, mas [sus descendientes] atribuyeron copartícipes a Allah; pero Alá está por encima de lo que Le asocian.” [7:190]”[1].
También transmitió Ibn Abi Hatim que Qatadah dijo: “Los mencionó como asociados en la obediencia y no como asociados en la adoración”.
Dijo Muyáhid sobre la Aleya: “Si nos das un hijo Salih [bueno en todo aspecto] estaremos siempre agradecidos” “dijeron esto porque ambos temían que no fuese humano”. Significados similares fueron narrados de Al-Hasan Al-Basri, Sa’id Ibn Yubair y otros.
CONCLUSIONES:
- La prohibición de utilizar cualquier nombre que implique en su significado la adoración de otro que Alá.
- La interpretación de la Aleya [7:189]
- Este acto de idolatría tiene lugar en el nombre únicamente, y no alude al significado real.
- Una hija recta y virtuosa es una gracia y merced de Alá.
- Los Salaf diferenciaban entre la idolatría en la obediencia y la idolatría en la adoración.
[1] Transmitido por Ibn Abi Hatim, pero considerado débil (Daif), por eruditos como Ibn Kazir y Al-Albani, entre otros.