La liberación de los esclavos en el Islam
La liberación de los esclavos en el Islam
El Islam fue dado por Al-lah para establecer la dignidad para la humanidad y recuperarla cuando esta se perdiera. Para tal fin, en el Islam no se discrimina ni se tiene en cuenta raza, color de piel, origen y/o condición social y económica. Por eso encontramos que en el Islam se promueve el principio de igualdad entre todos los seres humanos, y que la única forma en que una persona sobresale sobre la otra es por su Taqwa (piedad, temor reverencial de Al-lah). Dijo Al-lah, Glorificado sea (lo que se interpreta en español):
{¡Oh, humanos! Os hemos creado a partir de un hombre [Adán] y una mujer [Eva], y [de su descendencia] os congregamos en pueblos y tribus para que os conozcáis unos a otros. En verdad, el más honrado de vosotros ante Al-lah es el más piadoso. Ciertamente, Al-lah es Omnisciente y está bien informado de lo que hacéis.} [Corán 49:13]
Por su parte, el Profeta Muhammad, sallallahu ‘alaihi wa sallam, destruyó toda clase de diferencias entre las personas después de la conquista de la Meca, esto es evidente cuando él, sallallahu ‘alaihi wa sallam, le ordenó a Bilal ibn Rabah (el esclavo liberto de origen etíope) que subiera encima de la Ka’bah y que desde allí anunciara con su voz las palabras que llaman al monoteísmo y la adoración total y exclusiva de Al-lah, palabras que se encuentran en el Adhan (el llamado a la oración). Incluso antes de este incidente, encontramos que el Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alaihi wa sallam, hermanó en Medina entre Al Muhayirin (los emigrantes de la Meca) y Al Ansar (los nativos y residentes de Medina) sin discriminar a nadie porque fuera de su familia o porque fuera pobre, árabe o no árabe.
La peregrinación de la despedida y el principio de la igualdad
En el Hayy del Wada’a (la peregrinación de la despedida, que fue el primer y último Hayy que realizó el Mensajero de Al-lah), el Profeta Muhammad, sallallahu ‘alaihi wa sallam, declaró el principio de igualdad en frente de la multitud que observó la peregrinación con él, y le pidió a toda esa gente que transmitieran sus palabras a los ausentes. Ellos cumplieron con su misión al pie de la letra, y por ello es que todo lo que mencionó quedó registrado y llegó a nosotros.
El Profeta Muhammad, sallallahu ‘alaihi wa sallam, hizo esta declaración cuando dijo: “Toda la humanidad es de Adán, y Adán fue creado de barro. Un árabe no tiene superioridad por encima de uno no árabe. Una persona negra no es superior a una de piel roja ni tampoco una persona roja está por encima de una de piel negra; la única diferencia que hay entre la gente está en la Taqwa” .
Estas palabras fueron la primera declaración pública sobre la igualdad y la abolición de la esclavitud hecha por un líder.
El origen en el Islam es que todas las personas son nacidas libres y no esclavas, y eso es porque todos ellos provienen de una misma raíz, un solo padre y madre (Adán y Eva) y todos han nacido libres. El Islam vino a reconocer este derecho en un tiempo donde la esclavitud era común, el fuerte esclavizaba al débil y el noble y poderoso humillaba y pisoteaba la dignidad de los que, a su parecer, eran inferiores.